La piel del bebé es una de las más puras y delicadas que existen. Su suavidad, fragilidad y sensibilidad requieren cuidados específicos desde el primer día de vida. No se trata solo de higiene, sino también de proteger su salud, bienestar y desarrollo.
Si quieres cuidar de forma correcta su piel, es fundamental usar desde el primer momento productos respetuosos y mantenerla limpia. En este artículo te explicamos cómo protegerla correctamente, si es recomendable usar cremas y qué ingredientes naturales son los más adecuados para cuidar de ella y nutrirla de forma segura.
¿Por qué es tan delicada la piel de los bebés?
Durante los primeros meses de vida, la piel del recién nacido todavía está en desarrollo. Es más fina, pierde agua con facilidad y es más vulnerable a irritaciones, alergias y agresiones externas como el frío o el calor. Además, su barrera cutánea no está completamente formada, por lo que es más vulnerable frente a bacterias e infecciones.
Sin embargo, la piel nos permite sentir señales táctiles prácticamente desde los primeros momentos de vida, ya que nacemos con esa capacidad. Por eso, cuidarla es fundamental no solo para evitar molestias, sino también para conseguir un correcto desarrollo. Es una pieza clave para garantizar una buena salud y es un canal de comunicación y aprendizaje que permite a los recién nacidos explorar el mundo a través del tacto, teniendo un gran impacto en su crecimiento.
¿Es bueno ponerle crema a un bebé?
Sí, pero con criterio. Las cremas pueden ser beneficiosas para proteger, hidratar o calmar la piel del bebé, siempre que estén formuladas específicamente para aplicarlas en recién nacidos y se usen de forma adecuada.
Normalmente, se recomienda utilizar alguna crema calmante y ligera si cambiamos el pañal, para prevenir irritaciones o dermatitis en esa zona. También se suele aconsejar hacerlo después del baño, para mantener la barrera cutánea, o en casos extremos de frío o calor.
Consejos para cuidar la piel de tu bebé
Como hemos mencionado, la piel de un bebé es muy delicada, y no todos los productos protegen su salud. Para cuidarla de manera correcta, lo mejor es utilizar pocos ingredientes y de mucha calidad. Los más recomendados son los productos formulados de forma limpia y con compuestos vegetales altamente efectivos. A continuación, te traemos algunos consejos para cuidar y mimar la piel de tu bebé a la vez que respetas su delicadeza:
1. Evita los productos agresivos
Opta por limpiadores suaves, sin ingredientes tóxicos como sulfatos agresivos o perfumes artificiales. Recuerda que, en este caso, menos es más, y cuanto más simple sea la fórmula, menor será el riesgo de irritación. También es muy importante que los productos que utilices para un recién nacido estén formulados específicamente para bebés.
2. Baños cortos y con agua templada
Bañar a un bebé requiere mucho cuidado y atención, y también es un momento clave para poder cuidar su piel. Se recomienda bañarle tres veces a la semana y no hacerlo de forma diaria, de hecho, demasiados baños pueden eliminar los aceites naturales que protegen su piel. Se aconseja que el agua esté a 37,5 grados, que el baño tenga una duración de alrededor de los 5 minutos y utilizar un jabón suave para bebés, que respete su piel y limpie con delicadeza y precisión.
3. Cuidar el secado
El secado es una de las partes más importantes a la hora de cuidar la piel de un recién nacido, ya que, si no se hace de manera correcta, puede que el bebé no duerma bien y se generen gérmenes que lo podrían dañar. Se recomienda usar una toalla y comenzar por la cabeza, de manera suave y con toques pequeños. Después continuar con la parte superior del cuerpo, y terminar con la inferior, quitando toda la humedad sobrante para que no se creen infecciones.
4. Utiliza productos naturales
La mayoría de los productos naturales están formulados con ingredientes que respetan la piel del recién nacido, reduciendo la probabilidad de sufrir alergias cutáneas u obstruir los poros dificultando la absorción de ingredientes activos.
Algunas de las sustancias recomendadas para su cuidado son el óxido de zinc, la manteca de karité, aceite de oliva, caléndula, aloe vera, lavanda o proteína de guisante.
Cuida su piel desde el primer día
En Banbu creemos en la cosmética sostenible, segura y eficaz para todos, incluidos los más pequeños. Por eso, hemos creado una línea específica para bebés, con fórmulas respetuosas y libres de tóxicos:
Kalm: champú-gel que limpia con suavidad sin resecar ni irritar, respetando la piel y el cabello delicado.
Dream: leche corporal diseñada para hidratar, calmar y reforzar su barrera natural desde el primer día.
Lua: crema protectora para el culito del bebé contra la humedad y el roce, que calma y regenera la piel desde la primera aplicación.
Cuidar la piel del bebé es una labor que requiere suavidad, atención y productos adecuados. Las cremas pueden ser aliadas importantes si se eligen bien y se aplican de forma correcta. Optar por ingredientes naturales y fórmulas respetuosas es clave para mantener su piel sana, suave y protegida.